Con fianza

Ando en la vida con confianza, tengo la seguridad de lo que busco.  ¿Tengo la seguridad de lo que busco?
Sali a recorrer las veredas mojadas por esta lluvia de esta nueva region sub-tropical de Buenos Aires, adoquines brillando bajo una leve brisa de aire... ni frio, ni caliente, ni tibio... aire que acaricia.  Las gotas ya no caen tan espaciadas y comienzo a pensar en cuanta más confianza siento en mi ser cuando más en armonía con él me siento.  El equilibrio tiene que ver con muchas elementos o aspectos de nuestra busqueda, también tiene que ver con lo que ingerimos (física, psíquica y emocianalmente), y saber que dentro de las posibilidades siempre elegimos lo que queremos (inclusive cuando creemos no estar eligiendo nada y quejándonos por lo que nos sucede).  Tenemos la disponibilidad de hacer lo que queramos, las opciones que tenemos son infinitas.  Son las elecciones que podemos tomar tantas como los segundos que contienen lo que dure nuestro peregrinaje galáctico en esta dimensión, hasta encontrarnos con el momento de abandonar este barco llamado cuerpo en una caja de madera.

Sigo meditando, pienso en la palabra, se que la fianza en un sentido amplio de su significado es en principio una garantía.  En un mundo donde "a Seguro se lo llevaron preso" no podemos esperar muchas seguridades, pero si podemos trazar nuestro viaje de acuerdo a lo que deseamos.  Esa es la fianza que tenemos, esa es nuestra garantía.  Viene a mi mente una imagen de esos pequeños prismas de plástico que te vendian en los circos, que contenía un negativo en el otro extremo que podías ver apuntándolo hacia la luz... en el está la foto de un "cara de Sâo Paulo" que cruce en un viaje por Rio de Janeiro manifestando una expresión que me enseño que decía "eu me garanto", que representa que uno da fe de uno mismo.  Podemos decir que lo cierto es la seguridad que podemos tener en nuestros sueños, en nuestra intención y en la voluntad de alcanzarlos.
Por la simple razón de que no me gustan los paraguas es que voy, como casi siempre, sin uno... de todas formas la lluvia no es mala ni buena, sólo te moja.  Si me detengo en las gotas, vale decir que creo que el agua es un elemento reparador para nosotros, es parte de nuestro cuerpo y planeta en al menos un 70%, es un elemento que fluye... un buen conductor, conduce energia y viaja a traves de nuestro cuerpo componiéndolo por más de la mitad de su totalidad.  Me siento sumergido en el fondo del océano, la ciudad aún se encuentra iluminada, todas las casas ausentes de cuerpos, llenas de recuerdos, canciones, peliculas, fotografías, libros, ensayos, pinturas, pequeños objetos que cargan con un valor emocional tan grande como todos los numeros que puedan contener las computadoras para expresar la riqueza del planeta (Paradoja extraña la de este mundo capitalista).  Las voces que ya no estan conversan con mi mente que ya se ha ido, las palabras que nunca dije se escriben en el viento y corren con un mensaje, la charla que no mantuve se desvanece de mi memoria.  Una luz alcanza las profundidades, me elevo con ella, emergo, floto hacia el cielo, un trueno se propaga a lo lejos, el rayo recorre el lago.  Vuelvo en mi, conecto con el universo, con el resto de él.  Recuerdos sobre mis pasos, que continúan dejando mi alma llenarse de la "bendita agua" que no necesita de bendición humana alguna.  Miré por sobre mi hombro al pasado y dejé que vuelen reflexiones en mi mente sobre nuestros espejos, nuestros guias, nuestros compañeros de viaje.  Me volvi a encontrar preguntandome ¿Que quiero? (No puedo dejar de pensar que sufro en este momento de verborragia cibernetica mientras disparo palabras a internet como aniquilando vampiros en una noche sin estrellas), para responderme con claridad y aceptar que soy lo que quiero ser el tiempo, pero debo procurar siempre elevar mi grado de consciencia.
Lo que queremos es una constante susceptible de modificarse a cada instante.  Un psicólogo amigo de una prima (que no es prima) le ha dicho que "la vida es un sin sentido, el único sentido que tiene es el que le pongas vos".  Simple, concreto, lo que hacemos en nuestra vida esta asociado directamente con lo que queremos de ella y lo que hacemos por eso.  Debemos buscar lo que nos haga bien para que nuestro mágico tour por este parque de diversiones gigante sea lo maravilloso que deseamos.
Lo que pensamos, nuestras ideas que se convierten en acciones que nos hacen lo que somos, tienen siempre nuestra marca registrada.  ¿Como llegue a este lugar?, y me respondo:  buscando ser Felix (nombre propio, raíz latina de la palabra feliz), dejando atras fantasmas, eligiendo crecer, liberandome, siendo.  Me encuentro pleno en mis acciones,  hoy abierto a aceptar pasado, presente y futuro como resultado de mis actos, y a tener esto siempre en cuenta.  Me repito muchas veces y no me resumo, pero es que necesito derramarme en expresión.  Es en primera instancia escribir lo que siempre quise, y aquí estoy cumpliéndolo.  Sigo eligiendo, sigo aprendiendo, se que somos infinitos y es claro que debemos vivir equilibrando nuestros universos en busca de ese objetivo de hallar nuestra paz.  Debemos estar alertas.  El desapego es clave, el poder comprender que en primera instancia la soledad no existe, pero que es necesario encontrarnos solos para poder conectar de adentro hacia fuera y lograr el mismo orden de afuera hacia adentro.  Visualizar el cuadro que queremos pintar, el libro que queremos escribir, la canción que queremos cantar o bailar o saltar o gritar, el juego que queremos jugar, la decisión de ser quienes somos y hacer lo que nos hace bien, buscar aquello que nos brinda una sonrisa.
Camino con confianza, tengo la garantía de que mi vida es lo que voy construyendo de ella.  Puedo mirar adelante y sonreir, encarar el presente con felicidad, realizar el futuro a cada minuto dando de mi todo lo que puedo dar.  Avanzo, sigo creciendo, puedo resolver cosas que he llevado atadas por muchos años de mi vida.  Me siento mas grande y al mismo tiempo mas pequeño, ¿estaré ahora abandonando la adolescencia?.  ¡Tranquilo!, se que ciertas cosas nunca las perderé y que estoy adquiriendo más en el camino.  Recupero mi capacidad de asombro ante ciertas cosas que pueden parecer simples, la inspiración está en el eter, puedo tomarla cuando lo desee y dejar que vuele lo que pienso, darle a una idea un sentimiento.  Vuelvo bajo la ya tenue llevia y mi alma está tranquila, se que todo va a estar bien siempre que sepa cual es mi rumbo que he elegido.