
Golpea en la sien la burla del que es una mofa de si mismo, y reaccionan los dientes mordiendo el veneno para escupirlo en la cara de aquel que intenta rebajarnos. Se afila la lengua para acribillar con verdades y códigos el atropello. Hoy el sol se pasea por Marte, mientras en Júpiter el mar se ha hecho salado y los gritos desolados buscaron partir. El hombre se sabe solo, sin que nadie comprenda del todo su existir, el demonio decide acompañarlo para invitarle una nueva copa, un nuevo momento de evasión.